Cuentan que había una empresa, en la que su presidente, preocupado por el presupuesto anual que el mercado le imponía a establecer, convocó urgentemente consejo de administración.
Cuentan que en esta empresa, este presidente algo flojillo, solía dar semanas para que su consejo respondiera a su solicitud de reunión. En esta ocasión, la reunión se convocaba urgente y extraordinaria, era tan importante que les dió un plazo de respuesta de como mucho 2 semanas.
El consejo de esta empresa agotó el plazo que su flojillo presidente les brindaba para atender su urgente y extraordinaria solicitud, ante la gravísima y extraordinaria situación del mercado.
Ante tanta laxitud con los temas importantes la empresa quebró. Nunca mas se pudo oir a este presidente quejarse del mercado pues ya no tuvo empresa que dirigir, ni consejo que presidir.
Si cambiamos empresa por parlamento, y mercado por madrid...
Rivero pide pleno urgente
¿Lo mas rápido que se pueden reunir estos holgazanes, porque no tienen otro nombre, es en dos semanas?
Vayanse a tomar por el cu....
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