sábado, octubre 27, 2012

Aprender de mis errores

He pasado varias horas de este viernes noche poniéndome un poco al día en el facebook, twiter y demas rolllos internautas. Y he decidido, tras un gin tonic, volver a escribir algo por aquí.

Entre las cosas que he leído, mas bien visto, ha sido uno de los vídeos del magnifico Jordi Évole y su equipo en Salvados. El que he visto en esta ocasión ha sido el del 20 de Mayo de este año. Va sobre lo que significa un rescate ( con el profesor Gay de Liébana de la UB), con recorrido por atenas para conocer el "pulso" de sus habitantes y por último una entrevista al profesor Mayor Zaragoza.

También he estado buceando en la noticia de los resultados de Bankia. Y leído comentarios en facebook y en prensa sobre el chorro de millones que siguen saliendo por ahí. La verdad de Bankia es otra. El chorro está saliendo pero ya se midió hace meses. Lo que ocurre es que cada vez que sale la noticia de una entidad financiera lo que no toca es decir "la cosa está jodida!" como ya sabíamos desde hace un año. La noticia es decir " la cosa está jodida" con lo que el lector, liado en sus preocupaciones, lo que hace es sumar: lo jodida que ya está la situación con lo "nuevo" que le cuentan. Es como hablar del equipo de futbol que va último. Si siempre va último, poca noticia hay; pero siempre podrás decir que la cosa esta mala, pues aun no siendo novedad, lo parece.

Todo esto me ha llevado a la reflexión de si uno no debería saber mas de política de estado. De como deberían ser las cosas. Pues evidentemente como van, no funcionan. Y cuándo digo saber mas, me refiero a una manera formada, estudiada analaizada.

Esto lo digo por lo que me dijo hace tiempo un inglés sobre los españoles. Se refería en su experiencia al tener españoles como compañeros de trabajo. "Un español cuando no sabe de algo, da su opinión. Aunque no tenga ni idea del tema. Siempre tienen algo que decir, nunca dicen. No se. Es como una frase tabú en español".

Es decir, si alguien nos pregunta: oye y tu que piensas de los recortes de los sueldos de los funcionarios, oye y tu que piensas del copago farmaceutico, oye y tu que piensas de elevar los alumnos por aula, oye y tu que piensas de los resultados de Bankia. En todos estos casos, el español medio y me incluyo, lo primero que hacemos es responder. Como si por arte de magia tuviéramos que tener una opinión sobre el tema. Y así con el tiempo tenemos opinión de todo, pero así, por el viento que nos dió en la cara aquel día.

¿no deberíamos hacer un esfuerzo por analizar cada uno, qué ha sucedido y sucede para formar una mas potente visión de lo que ocurre?
¿soy el único que tiene la sensación de que se nos va el país de las manos, y que nadie tienen puta idea de como resolverlo?
¿cómo vamos a levantarnos a quejarnos de nada, si cuando sale la noticia de los resultados de bankia, nuestra respuesta es: ¡cabrones!?

No se. No se.

1 comentario:

emejota dijo...

Pues yo estoy de acuerdo en lo que dices hasta cierto punto. Opinión podemos tener todos, otra cosa es ser líder de opinión por lo tanto, lo que debe hacer el interlocutor es saber hasta dónde es válida la opinión del otro. Y, por otro lado, en este país, los líderes jamás se han decantado por la teoría de la Navaja de Ockham, con sus análisis sesudos mucho más influidos por condicionantes externos y de mercado y poco pegados a la realidad cotidiana. En el asunto de los funcionarios, cualquiera al que le pregunten te podrá decir: no sé quién va a comprar regalos estas Navidades. Parece ser que esa reflexión no se la hicieron jamás los gobernantes, siempre rodeados de señores cuyo sueldo cae íntegra en la buchaca porque tienen pagada hasta la adsl de la casa...