lunes, enero 29, 2007

Varias cosillas.

Claro que cuando uno quiere escribir algo en el blog, siempre hace un intento de que sirva para entretener, para hacer pensar-reflexionar, al menos para no hacer perder el tiempo.No siempre se consigue, pero vaya el intento por delante.

Después del anécdota de las raíces, volvemos a la literatura; o por lo menos entremos por una vez. En el curso al que asisto hace dos viernes, nos han hecho reflexionar sobre lo literario. Esta reflexión gira en torno aa varias dicotomías básicas pero muy potentes.


  1. Escribir y leer. La misma cosa son. Borges ya anticipaba el tema, y me he guardado una frase que me ha encantado; quizás pueda ser la base de unas buenas sesiones de escritura: "Escribir nos permite crear lo que queremos leer".
  2. Fondo y forma deben convivir en estrecha comunión, para que lo escrito se convierta en literario. Este punto, me ha parecido abrir ante mi curiosa mirada, un mundo nuevo por descubrir, haciendo paradas en la poesía, permitiendome empezar a disfrutar con los sonetos de garcilaso:
  3. si no, sospecharé que me pusistes

    en tantos bienes porque deseastes

    verme morir entre memorias tristes.

  4. Decir y sugerir es el tercer binomio a controlar. Me viene a la memoria cuando Cortázar sugiere el asesinato en el final de Continuidad de los parques.

Pues nada, a seguir con la rueda de molino que teje la tela de araña que nos ata a la vida diaria.

3 comentarios:

Miriam (flxt) dijo...

Ojalá yo supiese escribir. No vendría mal un curso como ese.

Almafuerte dijo...

Escribir y leer, leer y seguir escribiendo. Acabar dando en el clavo y escribir las lecturas ansiadas, para retroalimentarse, para morderse la cola como la pescadilla o como el hombre suficiente y sin costillas. Tenebroso. ¿Y la fórmula de imaginar y deformar?, ah! eso no implica escribir bien, pero, ¿qué es escribir bien?, ¿Cuánto camino separa a Cortázar de Dostoievski?, camino literario ninguno, imaginar y deformar. Escribir cada uno a su manera, mejorando, depurando e incluso siendo el más voraz crítico de la propia obra.

El chicharrero terrible dijo...

Amigo almafuerte, no compare lo incomparable. Solo piense, que si cuando leyó por primera vez un verso de Rimbaud algo le agarró las entrañas y se las sacudió durante un buen rato, es que hay algo de diferencia con lo escrito por Dan Brown.
La diferencia esta entre escribir bien o escribir sin mas.
Aunque todo esto yo se que usted lo comparte. Simplemente buscando la trasgresión, se plantea usted la definición atemporal y absoluta de la buena escritura. No dude que se encuentra mas cerca de un soneto de garcilaso que de una novela de Lucía Etxebarría.

Ea, lo dicho